De Amor y Música

Mi vida contada desde al Amor y la Música, que son mi razón de existir

Mi foto
Nombre:

Mayor, menor o mixto. Depende de vuestra elección. Todas mis publicaciones son fruto de la espontaneidad de mi pensamiento. No existen correcciones en ninguna de ellas. No busco justificar mis errores o aciertos, únicamente mostrarlos y compartirlos.

domingo, enero 25, 2009

Esperanza a ultranza: Recuerdo danza

Es perder el tienpo,en cuanto el presente se destina al futuro, ya no es presente. El tiempo carece de esencia en cuanto se usa en pos de un objetivo, un objetivo futuro.Sí, queda poco tiempo, pero aún así, no puedo dejar de aplicar mis pensamientos, mi viviencia presencial en el tiempo en cuanto aplicar esa fastasmagórica visión futura.

Más... queda tan poco (poco? un día , dos horas, bien pudieran ser la eternidad!).


Así andamos. En esta contrariedad. Iluminada (No dejo de prevenir mi consciente alienación, llenando de música estos inciertos instantes) por la música que compré hace pocos días , la cual describi!.

Nada mejor que, independientemente de lo ajeno, llenemos el tiempo por cuanto podamos precipitar en él nuestra entera circunstancia vivencial para no dejar que lo esperado en un futuro nos prive de nuestro presente.

Más. Digo:

No pienso dejar que la Esperanza (Esperanza es espera, es la aplicación de mi tiempo presente en pos de mi tiempo futuro) deje que mi tiempo presente no devenga en vacuo devenir, en pos de una incierta vuelta a un nuevo presente. Entonces, vivo, en un incierto presente, el cual, siendo así, incierto, almenos, me proporciona esa incertidumbre.

Es paradójico, sí. Pero es preferible vivir en una paradoja presente, que dejar de afrontar el paradójico presente en pos de un tiempo vacío fundado en un futuro, cuya esencia, esencialmente, aún no es. Ello sería, pues, una forma, ya no paradójica, si no, contradictoria, en cuanto deja una de hacer acto de presencia en un presente que anuncia un futuro, a sabiendas de su necesaria imposición.

Es decir: Se impone un futuro desde agente ajeno, más, no por ello dejo de andar en mi estancia presencial, para así, en esa construcción, poner aquella primera piedra que estas manos, esta mento, este cuerpo, y este espíritu, presenció, para poder recordar y, a su vez, junto al recuerdo, aprender de los errores, forjando así, nuevos aconteceres, los cuales, graciosamente (y no sin orgullo) moldeamos en forma de un nuevo acontecer, cuyo avatar ya hemos aventurado teniendo en cuenta una auténtica labor presente.

:-)


Nada, que hay que seguir esperando, no hay más.


Menos mal queda poco.


Una vez construído el pilar de la estabilidad laboral, esatndo en mi casa, sólo queda....

Ir a la caza de una buena mujer! sera divertido! no por alternancia! (nada más lejos de mi intención andar alternando en cuestiones amorosas! ya, esencialmente, en cuanto conjugo Amor a la hora de un maravilloso y novedoso encuentro, queda, automáticamente deshecha la opción de andaduras a medias tintas...!).



Un abrzo inmenso a mi amigo Juan, cuyo pseudónimo, Borràs, es conocido y familiarmente concebido en nuestra amistad insuperable (cuántas cosas han cabido en largos años!). Aún parece que fueron acontecidas hace pocos minutos. Con Juan, el presente es eterno. No pasa el tiempo. Porque los pilares que el alma construye, son eternos.

Me ha enseñado lo que es la amistad.

Yo también soy amiga. También enseño mi amistad.


Qué bonito es compartir. Aprender a aprender. Corregir errores. Escuchar. Sentirte escuchada.
Quién diga que no merece la pena esta vida, es que no es capaz de concebir que perder también es ganar.

Hablando de amistad, hoy quiero recordar a aquellas personas, las cuales, en relación, ya sea contínua o discontinua, llego a conclusiones que bien puedo firmemente corroborar: que, insistiendo en mi reiterada obsesión por el buen provecho de todo acontecer presente, experimento esea dádiva a cuenta de, sin duda, vivo el presente, en esa construcción eterna que engulle pasado y futuro en todo encuentro, aclaparador por exhuberante, sea cuando éste se tercie.


Oh! cierto! precisamente esas raras y puntuales coincidencias, que bien pudieran ser a destiempo, pero que, paradójicamente nunca lo son, pues siempre acojo con suma alegría, no hacen más que volver a rememorar en mí la sensación de no haber pasado más que el instante comparable a ir al labavo y volver a retomar la conversación.

Y han pasado meses desde entonces.


Así pues, nada más ardiente en cuanto a conmovedor, resulta tener el privilegio de poder experimentar lo eterno en algo tan especial como es el reencuentro de viejas amistades. Aquí, efectivamente, lo viejo es nuevo, por cuanto de viejo, añejo.


Entrañable:-)

Esperanza a ultranza: El presente queda colmado de todo sentido ulterior, transcendente.

Más,

Recuerdo danza, al compás de transcendente colmar todo presente de sentido anterior.



Y entre recuerdos de inescrutable amplitud (pues el recuerdo siempre ofrece novedades en todas y cada una de las veces en que lo invocamos o nos dejamos llevar por él) añadidos a aconteceres cuya magnitud señalan, en sí mismos, ese eficaz transcender hacia lo eterno en la posibilidad de los posibles, como resuelta afirmación de un dinámico acontecer Vivo, es lo que, junto a lo desconocido y azaroso, conforman lo que


Un puntualísimo cruzar mi mirada en la de otra persona totalmente desconocida, en la barra de un bar sea suficiente para saber que: Aquí estamos, y tal.

O dar un traspiés al darte cuenta, en la primavera, de que si llegas a pisar ahí en el paso que acabas de dar, te hubieras cargado una hormiga que en ese momento trasnprta una semilla de ese árbol platanero de las Índias, cuyas bolas, cuando se deshacen y vuelan ayudadas por el viento intencionado primaveral a fin de favorecer su fertilización para su continuidad existencial y bla, bla, bla...

Vamos, que entre la hormiga, el árbol... en fin, toda esa Natura en siempre evidentes signos de íntima conexión consigo misma.






Todas las aves desapercieron.
Si las aves desaparecen,
Yo también.

Limpio mi espíritu.
Diáfano.



Limpios los espíritus.
Naturaleza Perfecta,
Qué obviedad mentar
la perfección
de tu Tormento.






Llevo 20 horas escuchando música.

Y parece haber pasado ni un minuto.

jewelry box
Advert
jewelry box