Buenos augurios

Parece que todo sale bien ultimamente. Ya era hora. Me doy cuenta de que Nunca hay que deja de luchar, de resistir, de experimentar en los momentos agridulces para así poder saborear con más vitalidad las vivencias gozosas.
Sí, porque parece ser que la gente esta muy acostumbrada a quejarse de sus desgracias de tal manera que cuando tienen ante sí un momento agraciado no saben vivirlo.
Así pues, la felicidad sí que existe. Sólo hemos de buscarla en nosotros mismos. Atrevernos a ser felices. Lo más fácil es quejarse. La mitad de las depresiones pasajeras se pasarían si en lugar de sumirnos en la pesadumbre, lucháramos por buscar otra situación. Pero lo fácil es el medicamento. Atrévete a ser feliz por tus propios medios, me dije un día. Y, desde entonces, no hay momento en la vida que no intente vivir asumiéndolo hasta sus últimas consecuencias. Consecuencias que asumo desde la humildad de mi existencia. La cuestión es poner toda la carne en el asador, tanto para lo bueno como lo malo.

Parezco un libro de autoayuda. Pero sencillamente estoy saboreando un gran momento en mi vida. Son todo alegrías. Menos una (un delicado tema familiar que empaña la plenitud de júbilo). Alegrías que quiero compartir junto a mis seres queridos, junto a mis lectores (sé que almenos dos hay :-) . Que el mundo sepa que en este momento voy a gozar de este mi precioso momento vital.
Touloule Lautrec tiene parte de culpa en todo esto :-) Saludos desde aquí, caro semifuso. Que cuando sales en las partituras, miedo me das, a no ser que sea en un largo, facilitándome así la faena :-)
Voy a dar todo mi ser para que así sea. Mis energías iran destinadas a esa lucha que me hace sentir viva en el día a día.
Con Amor y Música, empieza, desde ahora mismo, desde hoy mismo, mi actividad en pos de reubicarme en este mundo que, estresado, me espera con alguna oferta de empleo para esta alma que pronto se queda en paro.

La lucha ha empezado. Pletórica de fuerzas me tenéis.

Salud a Manu.

Dedico esta misiva a todo el que se proponga ser feliz y, especialmente, a mi amada, para que ahora disfrute de su momentazo implicándose sin miedo a él.
Te lo mereces.