Viernes

Justo la mitad del mes. Se me esta pasando que ni me entero. Echaré de menos irme en marzo de este lugar de trabajo, pero es que se acaba, irremediablemente. Qué me deparará el futuro? espero que con mi iniciativa y un agraciado azar, me ofrezca algo más estable. Y más, ahora que tengo ya los 5 años de contrato del alquiler de este piso del cual estoy enamorada.

Hoy hemos pasado el día haciendo molduras en la madera con la tupí. Es una maravilla lo que se inventa la gente para facilitar el trabajo y que salga perfecto. Aunque con estas máquinas antiguas aún se pone mucha mano de obra humana. Hoy en día todas las grandes carpinterías se basan en creaciones en serie bajo control numérico. Metes un tablón y sale un kit para montar cualquier mueble. Es increíble.

Hace un mes fuimos a recoger unas máquinas de un carpintero que las donó al ayuntamiento. Tienen 80 años! parecen de la revolución industrial. Pero estan tan bien hechas que funcionan. Y, es más, las hacemos funcionar en nuestro taller. Me encanta que sea así. Se imaginan trabajar en una de esas carpientrías por control numérico? Dónde esta ya la mano artesanal? dónde los puestos de trabajo? Tiempos pasados siempre fueron mejores, en este caso. El candor, la vida latente de una madera acabada por una mano humana no tiene precio.

Pero hoy toca ya descansar, desconectar durante el fin de semana. Cambiar de actividad. La música es lo que toca ahora. Estoy muerta de ganas de realizar el ensayo de mañana. El clave, las flautas... maderas con ese candor y vida latente de la mano de un luthier...

El eterno retorno. Hacia sí mismo, para decirse a sí mismo, el giro que no es sino espejo de una sola y misma cosa que se mira mirando. Autoconsciencia. Amor. Música.

Desfase. Creo que paro, que me emociono.

Mi amada esta que trina con la porquería de oredenadores que hay en las aulas de informática de se IES. Para que luego diga el maldito conseller que la educación va bien. Y una M...
Ya me gustaría verlo dentro de un aula.

Amada mía: resignación. Sin dejar de luchar con lo poco que hay.

Ahora a descansar. Voy a dormir un montón esta noche.
Y a soñar otro tanto.