Exhuberancia.

Ya es Primavera

Aunque sea febrero aún.


Me lo han dicho las aves, hace 3 días, cuando en el azul velado del vespertino cielo, dibujaban geométricas disposiciones avanzando en esperanzador vuelo de ida, o de vuelta.



Ahora es cuando me apetece salir. Más cuando, hasta ahora, las circunstancias laborales me lo han impedido.

Esto es: hasta ahora, es decir, ahora, no voy a abstenerme en decir, con pleno orgullo, en cuanto al sacrificio que he dedicado a tal empresa, hasta el punto de dedicar a día de hoy una grandísima parte del grueso de este blog, que voy a empezar a disfrutar de la recompensa, a recoger los frutos y degustarlos como nunca hasta ahora he podido paladear.

Es una novedad vivencial de sumo alcance. Un pilar básico... alcanzado. Alcanzado ya.

Se suele decir que es increíble pero cierto. Y, en mi coyuntura personal tiene la connotación de una certidumbre por escudriñar, pues se me presentan infinitud de nuevos caminos, antes desconocidos, por los cuales tentar en un nuevo ir y venir como nuevo abanico de infinitos posibles.


Siento que una nueva etapa en mi vida ha comenzado.



Más que nunca, Amor y Música, adquieren renovado sentido.


Siempre esperanzador.


Como en Primavera, en que todo vuelve a la vida.

Una mirada

Un detalle.

Puntual

En el tiempo,

Eterno e inconmensurable,

En su acontecer.



Tu mirada.

FIJA

Quién diría que acabaría en el mundo de las finanzas.


Ya soy fija.


Ya he culminado el primer, primordial y prioritario objeto vital.



Ahora, a disfrutar del momento.



Carpe Diem.