De Amor y Música

Mi vida contada desde al Amor y la Música, que son mi razón de existir

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Mayor, menor o mixto. Depende de vuestra elección. Todas mis publicaciones son fruto de la espontaneidad de mi pensamiento. No existen correcciones en ninguna de ellas. No busco justificar mis errores o aciertos, únicamente mostrarlos y compartirlos.

miércoles, diciembre 23, 2009

Una chimenea para sentir el calor del hogar. Mientras afuera, en la serranía,azotan vientos nivales

 
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viernes, diciembre 18, 2009

Mi amigo Pedro sale de su casa en Jimena. Sonaba la sinfonía 40 ultimo mov. a todo vol´´umen en el coche donde esperaba y desde donde hice esta foto.

 
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milésima parte de el mar de olivos que cubre toda la cuenca del Guadalquivir. En la montaña se ve un punto blanco que destaca en el centro. Es Jimena.

 
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Aguas cristalinas brotan permanentemente de los caños, canalizadas desde el manatial,en el pueblo. Mi amigo bebe en l que, desde niño, nunca vió seco.

 
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a la falda de la mole de 2176 metros, Albánchez. Al fondo,bajo un cielo azull, la grandiosidad de los picos nevados de la Sierra de Cazorla

 
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Fuentes construídas como agradecimiento al manantial. Nacimiento acunado con Amor maternal..

 
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Ingente biodiversidad en un solo paso. Vergel de endémicas bellezas respirando

 
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Una alfombra verde es el manto que cubre la serranía

 
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desde 1500 metros de Altura así divisé Albánchez de Mágina

 
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Ayuntamiento de Albánchez de Mágina

 
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Entrada del pueblo de Jimena

 
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viernes, diciembre 11, 2009

Distendida conversación de alegre chanza

Vestida de hombre en el papel de castrato.


Nos miramos a los ojos en silencio y a una distancia de unos 30 centímetros. Procedí, sin más, a soltar la primera de la retahíla de surrealismos que se me ocurrieron y que con total libertad iban siendo entregados uno tras otro. Sin pasarlos por el control de calidad que analaizaría sus contenidos.


Cómo te llamas? dijo con jovialísima frescura. Le dije mi nombre y me dice quieres que te haga una dedicatoria?. Y entonces nuestras miradas se clavaron, fijas, de tal manera que sólo pude decir: Nada. Sólo quiero mirarte.



Y entonces se acercó bastante más y nos dimos lugar a que nuestras miradas no dejaran de estar en ese punto fijo para que el flujo no se detuviera en ningún caso.

Nuestro contacto se intensificó colosalmente y el flujo adquirió dimensiones colosales cuyo nexos sobrepasó límites que dejaron bien claro que yo soy lesbiana y ella también. Y, ni corto ni perezoso me ví mirándola aún con más fuerza. Estaba tirándole los trastos así, como venía, y ella no puso trabas ni se disgustó. Bien podría decir que gustaba de verse en esa situación. Seguro que Tantos hombres y mujeres la adoran que Don Giovanni es un burdo chulo de playa al lado de su lista de seductoras miradas que gustan verse inmersas en el juego de la seducción sin ningún impedimento ni barrera que limite su goce.

Le tiré los trastos, así, sin más. Y ella feliz como una perdiz. Le gustó, le gusté, nos gustamos.

Y ella vestida de hombre. De Castrato.

Qué cuadro!




Sólo faltaron los Giradino Armonico tañendo melodías amorosas venecianas del siglo XVII acompañando aquella escena.


Y el cuadro pintado por Tiziano.


jajaja.




"Monsieur Bartolí?!!?"

salió de mí entonando una bromista voz barroquísima y a su vez describiendo tontuela reverencia de intencionada torpeza. Vamos, con esa espontaneidad que me caracteriza pude advertir sin lugar a dudas posteriormente que la broma me quedó a las mil maravillas.

Le entró una risa descojonante. Unas risas de esas buenas. Sinceras y a base de bien. No se reía de mí, si no que me invitaba a la fiesta que se estaba dando. El irremediable contagio y el dueto de risas, tras la colosal mirada colmada de inconmensurable dimensión comunicativa, se convirtió en nuestra targeta de visita.



La historia no acaba aquí. Y lo que pasó a continuación nos llevó a un fianl del todo inesperado.


No acabamos en el Hotel Albinoni de Puerta del Ángel pero el encanto que siento aún a día de hoy me tiene sobrecogida.


Me llevo el ser a otro lugar y le voy a dar de comer, que esta ávido de conservar su esencia a base de descanso y comida.


Mañana más.

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